Definición de una institución de microfinanzas
Al igual que un banco, una institución de microfinanzas es un proveedor de créditos. Sin embargo, el importe de los préstamos es menor que los préstamos concedidos por los bancos tradicionales. Estos pequeños préstamos se conocen como microcréditos. Los clientes de una IMF suelen ser microempresarios que necesitan apoyo económico para lanzar su negocio. Este tipo de clientes son considerados demasiado arriesgados por los bancos tradicionales porque no pueden aportar garantías reales y porque suelen trabajar en el sector informal de la economía.
La metodología empleada por las IMF permite analizar con precisión la voluntad y la capacidad de pago de los clientes. Las IMF suelen realizar una encuesta sobre el terreno para recopilar la mayor cantidad de datos posible, no sólo del futuro empresario, sino también de las personas de su entorno.
Según el importe del crédito solicitado, los criterios son relativamente sencillos. Para los importes más elevados, es habitual esperar a que el cliente tenga un historial probado y haya realizado ya los reembolsos de los préstamos pequeños. La educación financiera y la cultura de pago son importantes.
El éxito de un proyecto de microfinanzas, y de un emprendedor, depende a menudo de que la familia y el círculo de amigos cercanos participen en la actividad de la empresa, directa o indirectamente.
¿Cómo se trabaja en una IMF?
Como en cualquier sector de actividad, existen varios puestos de trabajo posibles y varios puntos de entrada para trabajar en una IMF. Los puestos más habituales son: agente de crédito, analista financiero, director de sucursal, director de gestión de riesgos, controlador de gestión, formador de educación financiera, director de cuentas de sucursal, etc.
¿Qué requisitos se exigen para trabajar en una IMF?
Más allá de las cualidades humanas necesarias para dirigir una IMF y relacionarse con sus clientes, un profesional de las microfinanzas debe tener conocimientos y habilidades clave:
- conocer los aspectos jurídicos, las leyes y los reglamentos del país, incluidos los relacionados con el sector bancario y (micro)financiero;
- estar familiarizado con los productos y servicios financieros y no financieros ofrecidos por la IMF a sus clientes;
- ser capaz de explicar claramente, o incluso en términos no especializados, los principios de funcionamiento de los productos y servicios financieros y no financieros ofrecidos por la IMF a una clientela a veces neófita;
- conocer los procedimientos de concesión de créditos;
- ser capaz de evaluar los riesgos, sean los que sean:
- saber reunir los ahorros y gestionar el dinero en efectivo;
- controlar los costes de explotación;
- saber utilizar un SIG (sistema de información de gestión)
- saber cómo protegerse contra el fraude.