Definición de las finanzas inclusivas
Las finanzas inclusivas, a menudo confundidas con las microfinanzas, se refieren a los productos y servicios financieros diseñados para ayudar a las poblaciones de bajos ingresos. Es un término más global, por lo que abarca todas las actividades relacionadas con el sector financiero, pero también más preciso, ya que indica claramente su objetivo: incluir a toda la población en el sistema económico.
¿Por qué hablamos de finanzas inclusivas?
Se dice que las finanzas son inclusivas cuando permiten a una población determinada, ya sea una familia, un joven emprendedor o una empresa más grande, acceder a un conjunto de servicios y productos, a veces personalizados, que responden a una necesidad específica.
Estos productos o servicios pueden ser financieros, como el acceso a un crédito específico, un sistema de pago desmaterializado, un seguro o un sistema de gestión de transacciones. Pero también pueden ser no financieros, como la participación en la formación, la asistencia jurídica o contable, o el apoyo a la creación de una empresa.
Se dice que las finanzas inclusivas son responsables cuando tienen en cuenta a todos los protagonistas de la cadena de valor, es decir no sólo al beneficiario final, sinon también a los donantes, a la institución de microfinanzas y, más ampliamente, al impacto que puede tener en el planeta, que sea medioambiental, energético o económico.